
El cuento de los Reyes Magos
Un buen día, Melchor, un rey europeo de larga barba blanca, tan larga como su inteligencia, estaba mirando las estrellas desde su palacio. De pronto vio una estrella fugaz, que se detuvo arriba en el firmamento y brilló más que las demás. Melchor se sintió tan intrigado que decidió encaminarse hacia el horizonte para verla más cerca. Cabalgó sobre su camello y partió de viaje. Gaspar, reinaba en Asia, sus cabellos y barba eran castaños y, como Melchor, era un hombre de gran sabiduría. Él también vio la estrella desde su castillo y sin pensárselo dos veces, montó sobre su camello y emprendió la marcha tras la preciosa luz. En África, otro rey famoso por sus predicciones astrológicas se encontraba mirando el firmamento. Su nombre era Baltasar y sobre él…